En la pequeña localidad de Santiago de la Ribera, perteneciente al Ayuntamiento de San Javier, Murcia, se encuentra el lugar donde se forman todos los Oficiales del Ejército del Aire.
Fue creada en 1943, aunque hasta 1945 no comenzó su actividad con el ingreso de la primera promoción.
En la Academia General del Aire, aparte de su formación militar, los alumnos reciben su formación aeronaútica, en otras palabras: aprenden a volar.
Durante el primero y segundo año, la formación es básicamente militar y teórica; no es hasta tercero cuando se comienza con las prácticas de vuelo. La formación aeronaútica tiene lugar en tres fases:
- Elemental: Se realizan las primeras horas en un avión monomotor de hélice. Actualmente el modelo que cumple esta función es el Enaer T-35C Pillán, (E-26 Tamiz en su denominación del Ejército del Aire). Vuelo visual, formaciones, acrobacia y un poco de vuelo instrumental sirven como primera toma de contacto con el pilotaje de aviones.
- Básica: Durante el cuarto curso los alumnos tienen la oportunidad de pilotar una aeronave más potente y rápida con la que siguen adquiriendo experiencia. Desde 1980 el CASA C-101 Aviojet (E-25), un pequeño reactor monomotor, es el avión que se encarga de este entrenamiento avanzado.
- Especialización: En quinto, en base a sus notas de vuelo de los años anteriores y a sus preferencias, los futuros Oficiales realizan el curso que les va a especializar en Transporte, Caza o Helicópteros. Este último curso se imparte en otras bases:
- Matacán en Salamanca para Transporte.
- Talavera La Real en Badajoz para Caza.
- Armilla en Granada para Helicópteros.
Tras cinco duros años, los alumnos ascienden al empleo de Teniente y en función de su escalafón, eligen destino en las distintas Unidades del Ejército del Aire.
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