miércoles, 15 de enero de 2014

Mitos sobre la Aviación (3):


  • Es más seguro volar bajo y despacio: Falso. Recuerdo cuando empezaba a volar, que mi madre preocupada me decía: Hijo, vuela bajo y despacito. Con el tiempo descubrí que este era un mal consejo. Los aviones no se caen de repente, por lo que a más altura, más tiempo tienes para intentar solucionar el problema que puedas tener, además, es menos probable que te choques contra árboles, edificios, cables... Por otro lado, los aviones necesitan velocidad para mantenerse en vuelo, por lo que volar despacio puede hacer que entres en pérdida y el avión se caiga. Los argentinos suelen decir: Velocidad y altura, mantendrán tu dentadura.
  • El fallo de algún motor es catastrófico: Falso. En el caso de un monomotor, depende de en qué momento se produzca nos puede meter en una situación muy comprometida, por ejemplo si nos encontramos en un ascenso para evitar un obstáculo o en medio de una zona especialmente montañosa o abrupta. Si tenemos la suficiente altura, puede dar tiempo a intentar un rearranque en vuelo, que en función del motivo del fallo puede ser exitoso.  Lo que sí es cierto, es que cuando el motor se para el avión no cae en picado sin ningún tipo de control, sino que planea, permitiéndonos realizar un aterrizaje de emergencia si encontramos un lugar adecuado como un sembrado o una pradera. Estos aterrizajes forzosos, se pueden llegar a realizar con la misma suavidad que un aterrizaje normal si el piloto es lo suficientemente hábil y encuentra el campo adecuado. En el caso de aviones con más de un motor el problema es mucho menos serio, ya que todos los aviones están diseñados para poder volar con un solo motor aunque obviamente sus prestaciones se verían muy mermadas.
  • En caso de incapacitación de la tripulación, cualquier pasajero puede aterrizar el avión: Falso. Esta situación era muy típica en las películas de aviones de los 80. En la realidad, no es nada sencillo pilotar un avión si no se ha hecho nunca. Si faltase uno de los pilotos, alguien le podría sustituir y ayudar al otro tocando algún botón siempre con las indicaciones de éste. Si no estuvieran ninguno de los dos pilotos, estas indicaciones podrían ser por radio por alguien muy experto, pero sería bastante complicado; de esta manera, si el avión dispone de "auto-landing", se podría llegar a aterrizar. Lo que es seguro, después de haber visto a muchos alumnos coger los mandos por primera vez, es que nadie sin una mínima formación como piloto, sería capaz de aterrizar manualmente un avión de pasajeros a la primera. Sería complicado incluso para un piloto que no haya volado nunca ese tipo de avión.
  • En caso de accidente, con un paracaídas te salvas: Falso. La mayoría de los accidentes se producen sin tiempo de reacción o tan cerca del suelo que no hay posibilidad de saltar. En cualquier caso, saltar en paracaídas no es nada sencillo y sí muy peligroso, tanto que suele ser más seguro permanecer a bordo y sobrevivir a un aterrizaje forzoso. Eyectarse en un caza es muy peligroso y las posibilidades de supervivencia para alguien que no esté entrenado son muy bajas. Hay que destacar que eyectarse es una decisión que no se toma a la ligera y al contrario de lo que muchos piensan, son muy pocos los pilotos que se han eyectado alguna vez.

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